Henry Serván Vallejos fue ordenado Diácono

La Parroquia Los Santos Arcángeles estaba llena.

Habían venido fieles de las 17 capillas que la conforman, de los diferentes sectores geográficos, de las diferentes pastorales.

También estaban presentes, integrantes de la numerosa familia de Henry, muchos de ellos y ellas venidos desde Pedro Ruiz, su tierra natal en el departamento de Amazonas. Todos querían acompañar a Henry en la ceremonia de su ordenación diaconal.

Comenzó la procesión de entrada de los celebrantes: sacerdotes columbanos, sacerdotes de la diócesis y el Obispo de la Diócesis de Carabayllo, Mons. Lino Panizza OFM. Uno a uno fueron tomando sus ubicaciones en la parte superior del altar. Venían entre ellos, el P. Jhon que había sido uno de sus formadores y también el P. Napa, párroco de Los Santos Arcángeles, que también fue su acompañante.

Las canciones y las oraciones fueron llenando el ambiente, Mons. Lino recordó en su homilía que el camino misionero no es fácil, sobre todo, como el caso de Henry, cuando hay que ir a otros pueblos, a otras culturas, para ser su servidor y para anunciar en ellas la Buena Noticia del Reino de Dios; se puede ser ganado por la nostalgia y hasta el desespero, sin embargo –y pidió a toda la comunidad- nunca la faltarían las oraciones que le acompañarán en este su camino.

Llegado el momento de la ordenación, Henry fue convocado a ponerse delante para que el obispo pudiera consagrarlo. Especial fue el momento de invocación en las letanías de los santos. Junto con los santos y santas peruanas, los nuevos santos, San Pablo VI y San Oscar Romero, fueron también invocados para acompañar al nuevo diácono.

La mamá y el papá de Henry, trajeron luego los ornamentos con los que fue vestido, el P. Jhon –su formador- fue el encargado de hacerlo para que luego pueda subir al altar y ponerse a acompañar cumpliendo su nueva tarea. Al momento de la comunión, el nuevo diácono se encargó de compartirla. Toda su familia y muchos de los asistentes querían recibir de manos del nuevo ordenado la comunión.

Al momento de agradecer, el P. Cathal, Director Regional del Perú, agradeció a toda la comunidad el haber acompañado esta ceremonia y a Henry en su labor pastoral. Recordó con gratitud, que en el año del Centenario Columbano, en este mismo templo, fue ordenado Salustino Villalobos iniciando las actividades por el centenario, y ahora, casi al terminar este año festivo, se hacía también con la ordenación de este nuevo columbano peruano.

La Eucaristía terminó, pero la alegría continuaba en el corazón de cada asistente, una larga fila se hizo para felicitarle y agradecerle su decisión y testimonio.

Fuente: Columbanos Perú