La ceremonia, en que recibieron la condecoración junto a 25 personas más, se llevó a cabo este domingo 24 de julio en la tradicional eucaristía en la Catedral Metropolitana, momento en que se conmemora al patrono de la cuidad y de la Iglesia de Santiago.
Autoridades y cientos de fieles repletaron la catedral metropolitana en el día del Apóstol Santiago. La eucaristía fue presidida por el cardenal Ricardo Ezzati, en su homilía pidió al Señor, Te imploramos para ser fieles y poder contribuir para que en nuestra cuidad podamos anticipar en comunión, la promesa de la tierra nueva que el señor nos ha prometido. Por intercesión del Apóstol Santiago, que el Señor nos conceda paz y prosperidad, y de manera especial en este año jubilar de la misericordia, crecer en la práctica de la justicia y de la solidaridad, dijo el Arzobispo de Santiago.
Además se refirió a los más desamparados de nuestra cuidad. La exclusión es una realidad que nos inquieta y que nos lleva a preguntar, cómo es esto posible, en pleno siglo XXI. Te pedimos que nos enseñes a hacernos prójimos de cada persona que sufre en nuestra cuidad, en la solemnidad del Apóstol Santiago, como discípulo del Señor. Comprometámonos a contemplar con los ojos de misericordia, la vida de las seis millones de personas que compartimos en esta cuidad.
La Cruz de Santiago Apóstol
La condecoración del Apóstol Santiago es una distinción que se le entrega a personas que viven el testimonio de Jesucristo como verdaderos discípulos y misioneros suyos, y los valiosos servicios prestados a la Iglesia de Santiago, en diversos campos, como la evangelización, la pastoral, la promoción humana, la educación católica y en caridad, especialmente en este año de la misericordia. En esta ocasión 27 personas la recibieron.
Gracias por cultivar en sus corazones y comunidad la ternura, la compasión, la dedicación por los hermanos más abandonados. Ustedes representan a tanta gente de sus comunidades y para ellos y en nombre de ellos, reciben este reconocimiento de su Iglesia. Sigan junto con los hermanos y hermanas, que los acompañan en las obras entregando misericordia. Gracias a ustedes queridos hermanos, dijo el cardenal Ezzati a los condecorados.
Berta Martinez, dijo sentirse más comprometida aún tras recibir la cruz del apóstol. El servicio que lo hago al Señor y a nuestros hermanos que lo necesitan, es como un apostolado silencioso, y que me vengan a reconocer esto es una gracia de Dios. Ahora a seguir con ello y con más ganas que nunca
Contenta por el reconocimiento pues es una gran responsabilidad y da ánimo para poder seguir siendo testimonio y aportando en la construcción del Reino por lo más pobres y excluidos desde la Pastoral Social, que es donde yo trabajo, dijo Ana Legthon tras la ceremonia.
Santiago Apóstol
El Apóstol Santiago es el patrono de la ciudad de Santiago y de la arquidiócesis. Su imagen se encuentra al interior de la Catedral Metropolitana, en el costado sur. Igualmente, Santiago Apóstol es patrono de otras importantes arquidiócesis de América: Santiago de Cuba y Santiago de Caracas, en Venezuela, entre otras.
Nació en Betsaida cerca del lago de Tiberiades (Palestina), hijo de Zebedeo, hermano de Juan, fue de los primeros llamados por Jesús, junto con su hermano para integrar el grupo de los Doce. Jesús les da el apodo de Boanergues (que significa hijos del trueno) por su carácter impetuoso.
Pequeña reseña:
HERMANA KATHLEEN RIORDAN KENNEDY
Religiosa de la congregación Misioneras de San Columbano, más conocida como Hna. Katthy de nacionalidad irlandesa, llegó a Chile en 1974. Su acentuación misionera y evangelizadora ha estado centrada en la catequesis familiar y la pastoral social, donde descubrió el flagelo del alcoholismo entre muchas familias, y esta ha sido su principal motivación para ayudar misericordiosamente a cada uno de sus semejantes por el daño físico y espiritual que sufren tantas familias por esta enfermedad. La hermana Katthy comparte su vida con la comunidad de San Matías en Puente Alto
HERMANA ANGELA McKEEVER McDONNELL
Misionera de la Congregación San Columbano, su gran trabajo pastoral y misionero en la Arquidiócesis de Santiago ha sido grupos de Alcohólicos Anónimos y Narcóticos Anónimos dentro y fuera de la cárcel, preocupándose además de las familias de los internos. Religiosa de trato amable y buen humor con los internos que permiten que muchos confíen sus historias de vida y sufrimientos. Ella les comparte que solo el poder de Dios puede liberar al adicto de su enfermedad.
Fuente: Comunicaciones Arquidiócesis de Santiago
